Este país asiático sigue siendo uno de los más misteriosos y exóticos para el resto del mundo. Por su forma de ser, por sus costumbres y tradiciones, los japoneses atraen a un gran número de turistas. Japón cuenta con una vasta selección de restricciones, el conocimiento de los cuales les llevará a buen puerto en la comunicación con sus ciudadanos.
No descalzarse: se quitan los zapatos en casa, en santuarios, iglesias. Incluso hay zapatillas especiales para ponerse mientras se está en el cuarto de baño.
Sonarse la nariz en público: se considera un gesto ofensivo y de una persona maleducada.
Dar propina: no es común e incluso puede considerarse ofensivo.
Clavar palillos en un plato de comida: este gesto es un ritual funerario.
Comer en trenes: aunque ocurre, se suele considerar de malos modales, no solo en el transporte, sino en otros lugares públicos.
Tirar comida a la basura: el gesto demuestra la falta de respeto hacia las personas que la prepararon y que suelen prestar una gran atención al proceso.
No separar la basura: en Japón el reciclaje es muy importante, el 90% de los residuos se aprovechan.
Lucir tatuajes en público: está estrictamente prohibido e incluso hay señales que lo advierten.