Lo mismo ocurre cuando compartes fotos y videos a través de otras redes sociales; la resolución de la imagen nunca será la misma que del archivo original.
Y la otra, es un sencillo truco que te permitirá seguir usando WhatsApp sin renunciar a la calidad de la imagen.
La clave consiste en “engañar”, de cierta manera, al sistema y enviar la imagen en forma como documento en lugar de como foto, para acceder al formato original y que la aplicación no lo comprima.
Estos son los pasos que debes seguir
- Abre la conversación con la persona o grupo al que deseas enviar la imagen.
- Pulsa en el ícono inferior de la pantalla para seleccionar más archivos.
- A continuación, selecciona la opción “Documento”.
- Busca la foto en el explorador de archivos de tu teléfono.
La única desventaja que ofrece este método es que no podrás acceder a una vista previa de la imagen. El tamaño máximo permitido es de 100MB.

