Lorenzo Castro E.
Miami, 3 mar (EFE).- El director dominicano José María Cabral reconstruye la matanza de haitianos ordenada en 1937 por el dictador Rafael Trujillo en su más reciente largometraje, “Perejil”, con el que devuelve a República Dominicana a su “pasado oscuro, xenófobo y racista”, cuyos coletazos aún persisten hoy, según dijo a Efe.
El largometraje, cuyo estreno mundial se dará este domingo en el Festival de Cine de Miami, trae a la actualidad la orden genócida de ejecutar la llamada “masacre del perejil” y lo hace a través de los ojos de Marie, una joven haitiana a punto de dar a luz y casada con un dominicano.
Trujillo (1891-1961) ordenó a sus tropas erradicar a los haitianos residentes en territorio dominicano, en especial en el noroeste del país, en la frontera con Haití, para lo cual, y de ahí el título de la película, se identificaba a las víctimas a través de la palabra “perejil”, porque en la lengua créole la letra “r” tiene una diferente pronunciación.
“Fue una orden xenófoba y racista”, afirma el joven realizador sobre la ejecución que se desarrolló en los primeros días de octubre de 1937 y por la que en pos de “blanquear” a la población, como señala Cabral, llegaron a morir incluso dominicanos de raza negra o mulatos.
Cabral destaca que uno de los motivos de haber filmado “Perejil” es que la masacre no es un “tema de discusión” en las escuelas hoy en día y que en su país pareciera que “no hay interés en entender lo sanguinaria que fue la dictadura de Trujillo”, cuya figura aún tiene unos cuantos seguidores.
“Hay una idea de poder esconder nuestra xenofobia, de no querer ver ese pasado oscuro, xenófobo y racista que se respiró en esa época y aún existe, aunque no al mismo nivel. Tiene que ver con no querernos ver a nosotros mismos y a nuestro pasado”, sentenció el joven director.