Uno de los estrenos más esperados de este año ha sido sin dudas Cruella. La cinta anunciada varios años atrás, representaba una excelente oportunidad para Disney ante su objetivo de resignificar sus cuentos infantiles, contando nuevas historias a través de la perspectiva de sus villanos.
Partiendo del éxito de Maléfica en sus dos entregas, los estudios han puesto en la mira a otros personajes para reinventar la narrativa contada a varias generaciones de lectores. Una nueva oportunidad llegaba representada por Cruella, popular historia basada en el cuento infantil «Los 101 Dálmatas¨ escrito por Dodie Smith en 1956.
De aquella historia solo conocíamos que los cachorros eran perseguidos por una horrible y sofisticada villana de nombre Cruella de Vil. El filme animado fue llevado a la pantalla grande en 1961, más adelante, en el año 1996, Glenn Close daría vida al legendario personaje en una película que no empleó dibujos animados.
En este 2021 las salas de los cines por fin recibieron a «Cruella¨, la historia contada en versión «precuela¨, dirigida por Craig Gillespie. Siendo lo contario a una secuela, la película nos muestra los verdaderos orígenes de esta villana, llevándonos a comprender las razones detrás de la crueldad que la define.
Emma Stone interpreta a Estella, una joven y creativa diseñadora de modas, dispuesta a triunfar a lo grande en ese exigente y competitivo mundo. En el transcurso se dará cuenta de que tener talento no será suficiente para lograr su objetivo.
Con esta nueva versión los orígenes del personaje se ubican en la década de 1970, viviendo una plena revolución Punk en la ciudad de Londres. Tanto como la historia en sí, Cruella se cuenta a través de un poderoso trabajo de vestuario a través del que conocemos la evolución y transformación del personaje.
La artífice de este importante elemento técnico es la veterana Jenny Beavan. La diseñadora de vestuario británica ganó su primer premios Óscar en el año 1986 por la película «A room with a view», y luego volvió a ganar la estatuilla por su trabajo en «Mad Max: Fury Road» en el año 2015. Entre una y otra, solo en los premios de la Academia ha obtenido ocho nominaciones, destacando su genial trabajo en películas como «Sense and Sensibility», «The King´s Speech», «The Remains of the Day», entre otras.
En esta nueva aventura cinematográfica, para el personaje de Cruella, Beavan ha creado más de 45 looks. La oportunidad de trabajar el vestuario tomando la referencia Punk de los años 70, fue la motivación para que la experta tomara la decisión de participar en la película.
La historia del personaje principal se va contando por medio de lo que viste, de esta manera podemos ver como la protagonista pasa de vestir ropa de segunda mano, hasta llevar los trajes más espectaculares, que hablan finalmente de su gran talento y amor por la moda.
«La moda no es lo mío», confiesa Beavan agregando, «pero puedo tomarla como elemento para contar una historia. Yo crecí en la década de 1970 así que recuerdo todo de primera mano, y hay algunas cosas maravillosas que regresaron a mí en ese proceso. Hay muchas referencias, maravillosas fotografías encontradas en Internet y revistas de moda que puedes explorar».
En rueda de prensa previa el estreno, Beavan hizo referencia a su equipo creativo por el trabajo realizado, ya que cada look tenía un propósito, por lo tanto el vestuario en esta cinta transmite un gran porcentaje del background del personaje y la historia que le circunda.
Blanco, negro, rojo son la bandera de Cruella. En cuanto a su contraparte, la Baronesa von Hellman, interpretada por Emma Thompson, el vestuario creado consistió en la creación de 33 outfits, que de alguna manera se definen como una contraparte de la rebelde protagonista de la historia.
En este caso Beavan trabajó destacando la silueta de Thompson, con creaciones muy femeninas, más inspiradas en la época del «New Look» creado por Christian Dior.
Cruella es una película entretenida sin dudas, e ideal para diversidad de público, sin embargo los amantes de la moda tienen verdaderamente un plato fuerte servido y listo para disfrutar. Si aún no has ido al cine, este es un buen momento.
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