Los jugadores de los Baltimore Ravens Terrell Suggs y Ray Lewis prestaron su poder de estrellas a las protestas contra el himno nacional de Estados Unidos mientras la mayoría de los jugadores y entrenadores de la NFL se arrodillaron o cruzaron de brazos antes del partido entre Ravens y Jacksonville Jaguars que se realiza este domingo en Londres.
Sus protestas llegan al mismo tiempo que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, renovara sus críticas a los atletas que se arrodillan durante el himno nacional. El domingo por la mañana en Twitter, Trump atacó los registros de popularidad de la liga y dijo que los jugadores deberían ser despedidos o suspendidos por dichas protestas.
“Si los fanáticos de la NFL se rehusan a ir a los juegos hasta que los jugadores dejen de faltar al respeto a nuestra bandera y nuestro país, verán qué rápido cambian las cosas. ¡Despedir o suspender!”, tuiteó temprano el domingo.
Los tuits llegaron a la mañana siguiente de que Trump se lanzara contra las dos ligas deportivas más importantes de Estados Unidos al retirar una invitación a la Casa Blanca a los campeones de la NBA, los Golden State Warriors, y al exigir a los dueños de los equipos de la NFL a despedir a cualquier “hijo de p***” que “falte al respeto a nuestra bandera”.
Los analistas esperaban aun más protestas en los juegos de la NFL este domingo. Y al menos dos docenas de miembros de los Ravens y de los Jacksonville Jaguars participaron de algún modo en la protesta durante el himno.