Por vez primera, desde que compartiera con el mundo la sorpresa del nacimiento de su hija el año pasado, Naomi Campbell la presenta oficialmente al mundo. Ha sido en la portada de este mes de la revista Vogue Británica donde la súper modelo, vestida de negro, ha posado para el lente de Steven Meisel para la que es considerada como una de las portadas más importantes de su carrera.
La modelo de 51 años recibió a su hija en mayo de 2021. Se ha especulado que la niña fue adoptada, sin embargo Naomi ha revelado en la entrevista que es efectivamente su hija.
«No es adoptada, ella es mi hija. Puedo contar con una mano el número de personas que sabían que la iba a tener. Es la mayor bendición que pude haber imaginado. Es lo mejor que he hecho en mi vida», confesó la modelo a la publicación.
En la entrevista además aborda una amplia variedad de temas, entre estos la amistad que al día de hoy la une con Cindy Crawford, Linda Evangelista y Christy Turlington, con las que se mantiene en contacto a través de un grupo de WhatsApp.
«Fue un tiempo increíble, pero trabajábamos muy duro» dijo sobre aquellos años cuando debutaron en las pasarelas. «No importaba cuantos cambios de outfits, cuantos shows en agenda, nunca decíamos que estábamos cansadas. Hacíamos ocho shows en el día y luego íbamos a celebrar con los diseñadores en la noche. Me pregunto a veces si las modelos ahora pueden mantener el ritmo que nosotras teníamos», agregó.
También habló sobre la importancia de la diversidad en la industria de la moda, exponiendo que su compromiso con las causas sociales es producto de su crianza en manos de mujeres muy fuertes: «Estoy muy orgullosa de ver la diversidad ahora, pero digo esto con toda sinceridad: No estamos aquí como una tendencia. Hay muchas compañías que lo hacen solo porque no quieren recibir un llamado de atención. No. No lo hagan desde ese lugar, háganlo porque entienden que es lo correcto. Todavía hay mucho camino por recorrer».
En esta edición la que es considerada como una de las modelos más importantes del mundo, lució piezas de Alexander Vauthier, Chanel, Alaïa y Casadei, con estilismo de Joe McKenna, peinado de Guido Palau y maquillaje por Pat McGrath.