La firma cuyo director creativo es el talentoso diseñador dominicano Julio Marcano, presentó en su tienda del Blue Mall la colección Interludio 2015 una propuesta cargada de sofisticación y sentido vanguardista, plena de carácter y fuerza estilística.
La fascinante historia de buena moda que comenzó en febrero pasado entre Patric Love y la República Dominicana con la apertura de nuestra primera tienda en la vibrante Santo Domingo, vivió un nuevo capítulo con la presentación a clientes y representantes de los medios de comunicación social de la Colección Interludio, continuación de las claves maestras de “Génesis”, la propuesta con la que a principios de 2015 Julio Marcano, director creativo de la marca, abrió las puertas del universo femenino de Patric Love a una clientela amante de la elegancia.
Precisión en las líneas y en los cortes, un manejo impecable de las proporciones, una paleta de color sobria, sin estridencias; una clara atención a los detalles y una apuesta decidida por el diseño de vanguardia, imbuido del sentido elegante, atemporal y perfeccionista de Patric Love son frases que definen bien la esencia de esta colección.
Crepé, pailletes de lentejuela, tul, detalles en organza, fibras de seda, lino y algodón, en colores que van del rosa al azul, del negro al blanco, pasando por estampados puntuales, hasta llegar a tonos nude, dan carácter a una colección fresca, de aire juvenil y acento versátil que resume bien la filosofía de Patric Love: diseñar para una mujer moderna y activas que no deja a un lado el natural romanticismo y necesidad de confort típicos del alma femenina.
En esta cita con clientas y amigos periodistas, Patric Love también mostró trajes para ocasiones estelares, modelos en los que la verdadera esencia del lujo se pone de relieve en un trabajo de taller llevado a cabo bajo los parámetros de la alta costura: uso de calados, bordados de gran impacto, volúmenes un tanto opulentos y detalles súper sofisticados, todo pensado para que la mujer Patric Love sea el centro de todas las miradas, la figura más brillante de la fiesta, la estrella de la noche.
Una ocasión tan especial como la que convocó a tanta gente especial en el Blue Mall Santo Domingo, tenía que estar ligada necesariamente a aliados de altura, muy a tono con la calidad que cultivamos en Patric Love. Para eso se contó con la presencia en República Dominicana de Ricardo Sanz, extraordinario chefs del prestigioso restaurante Kabuki, el japonés más célebre de Madrid, galardonado con una estrella de la prestigiosa Guía Michelin, alfa y omega de los paladares gourmet del planeta. Él y su socio, José Antonio Aparicio, llegaron desde España para deleitarnos con deliciosos platillos que, por si fueran poco, estuvieron acompañados por dos extraordinarios vinos del catálogo de la empresa El Catador: el espumante italiano Villa Jolanda, así como el fantástico vino Sauvignon Blanc de la casa californiana Woodbridge, una cepa de sabores nítidos, con acentos frutales y cítricos, perfecta para el maridaje con platos a base de pescado como los que ofrece el Kabuki.
Fue una celebración magnífica, un interludio mágico en medio de la apretada agenda de clientas y amigos, que celebraron con el equipo de Patric Love la buena moda de una firma que llegó para quedarse.
