Santo Domingo RD.- Desde sus inicios, en 1884, Bulgari siempre ha encontrado en Roma, en sus plazas y monumentos, una inagotable fuente de inspiración. A lo largo de los años, la Ciudad Eterna se ha convertido en el ADN de la firma, dando forma a auténticas obras de arte.
Pasión, paciencia y perseverancia son los pilares de sus colecciones que suponen una exaltación del Renacimiento, del Barroco y del arte de la Antigua Roma en general.
‘Roman Wonders’, maravillas romanas, así llama la propia Bulgari a sus joyas. Piezas que van más allá de la belleza de sus preciosas gemas, pues son capaces de provocar emociones, como cuando contemplas una obra de arte.
Arquitectura romana
Los collares de alta joyería ‘Roman Wonders’ se inspiran en la espectacular cúpula de la Iglesia Sant’Ivo alla Sapienza de Roma. Sin duda, “un homenaje a la estética barroca del arquitecto Francesco Borromini”. Esas piezas cuentan con una piedra preciosa cortada por un cojín central rodeada de un marco de diamantes.
1.000 horas de trabajo
Su pieza más representativa barroca, Lady Arabesque es un collar de alta joyería en oro rosa con un zafiro morado en talla pera, un zafiro rosa en talla pera, dos zafiros en talla cojín, turmalinas, esmeraldas, diamantes… Una pieza que supuso más de 1.000 horas de trabajo.
Volúmenes opulentos
En la ciudad de Roma se encuentra el taller. Allí es donde buscan el corte, montaje y el resultado perfecto. Diseños arquitectónicos y volúmenes opulentos, gemas pulidas como las esculturas de mármol.
“Cada creación refleja el arte y el espíritu exuberante de Roma”.