Santo Domingo RD.- Tom Cruise vuelve a jugársela en su nueva producción “Misión Imposible: Sentencia Moral parte 1”, en la que se evidencia escenas más arriesgadas y con mayor complicación técnica y física.
Y es que el actor en este nuevo proyecto ha llegado a los 500 saltos en paracaídas, más de 30 diarios, para llegar a la perfección en su película.
Paramount acaba de distribuir la versión extendida de la secuencia de acción más espectacular de la historia del cine, en la que se observa al actor, que cumplió el pasado julio 60 años, lanzarse por un acantilado Noruego subido en una moto para después hacer un salto base.
Para poder rodarse a la perfección, igual que ocurrió en la anterior entrega de la saga, ‘Misión Imposible: Fallout’, el actor dedicó muchísimo tiempo a entrenamiento y saltos en paracaídas, para mejorar sus habilidades de control en el aire, así como la coordinación con otros saltadores. Y, por supuesto, motocross. Una habilidad que el protagonista de estas cintas, Ethan Hunt, al que Tom Cruise encarna desde 1996, controla a la perfección.
Pero nada de esto funcionaría y sería posible transmitirse bien el cine, si las cámaras no están perfectamente coordinadas para que el espectador vea que es el propio Tom Cruise el que sube a esa moto y hace semejante locura. Ahí es donde entra el trabajo técnico bestial de los profesionales de la cinta, así como el director Christopher McQuarrie, que es quién debe encontrar “la lente correcta, la plataforma correcta, el medio correcto”.
“Eso significa que la cámara tiene que estar delante de Tom y lo más cerca posible de él”, explica el director. “Porque si lo hacemos todo y no lo captamos bien, ¿para qué lo hacemos?”, cuenta Cruise, que hasta llegó a bromear en el set con que la primera regla del salto debería ser que no le golpearan con el dron y que lleva tapones en los oídos para no oír sus propios gritos.
“Misión Imposible: Sentencia Mortal parte 1” llegará a los cines hasta julio de 2023, más de tres años después de comenzar a rodarse.