Por Diana Suriel

Simone Biles es una de esas atletas sobre las que se mantenía el foco de la expectativa, ante  la realización de los juegos Tokyo 2020, y no es para menos. La laureada atleta fue una de las grandes artífices del gran éxito en el medallero de los Estados Unidos, durante las Olimpíadas celebradas en Brazil en el 2016

Ayudó a su equipo a ganar el oro y de manera individual se alzó también con la presea dorada Ha sido de las gimnastas más completas , disciplinadas y talentosas de la historia y ante su record personal todos se quitan el sombrero: Siete veces campeona nacional, ganadora de la medalla de oro en los juegos de Río 2016, cinco veces campeona del mundo y la única que lo ha conseguido tres veces consecutiva, además de ser campeona mundial en todas las modalidades de la gimnasia artística.

A sus 24 años Simone Biles es una de las grandes estrellas del mundo deportivo, de modo que su participación era muy esperada en estos juegos, y no es para menos.

El pasado domingo iniciaron las pruebas de gimnasia y la actuación de Biles se convirtió en noticia, pero no por los motivos esperados. Su desempeño en las pruebas preliminares no fue el mejor, tuvo varias fallas y una mala caída lo que le hizo ganar una puntuación muy por debajo de las que ha conseguido con su potencial. El salto en el caballete era la primera prueba y al no lograr superarla, se convertiría en la última para ella en esta competencia.

 

Junto a su entrenador tomó la decisión de suspender su participación, pasando entonces a servir apoyo a sus compañeras. Los rumores de lesión no se hicieron esperar, los que luego fueron desmentidos, esperándose para este martes nuevamente su presencia en la carrera por el oro final. Sin embargo, esto no fue así.

Biles ha saltado a la palestra esta vez por una razón muy diferente. La gimnasta olímpica decidió abandonar la competencia para dar prioridad a su salud mental. En una rueda de prensa ofreció declaraciones de las que todos los medios se han hecho eco. Más allá de sus logros la deportista ha preferido sincerarse y mostrar la cara humana que pocas veces vemos, detrás de esas estrellas del deporte que logran proezas que sobrepasan lo humano.

 

En varias ocasiones Simone ha expresado lo difícil que ha sido para ella manejar la intensa presión a la que ha estado sometida, presión que claramente ha pasado factura.

«Después de la actuación que hice, simplemente no quería seguir. Tengo que concentrarme en mi salud mental. Simplemente creo que la salud mental es más importante en los deportes en este momento. Tenemos que proteger nuestras mentes y nuestros cuerpos, y no solo salir y hacer lo que el mundo quiere que hagamos», declaró Biles a los medios.

«Ya no confío tanto en mi msma. Quizás esté envejeciendo. Hubo un par de día en que todo el mundo te tuitea y sientes el peso del mundo. Como cualquier persona,  a veces simplemente tienes que dar un paso atrás».

Tras su salida de la competencia, Estados Unidos ganó la medalla de plata, quedando Rusia con el oro e Inglaterra con el bronce.

Aún quedan por realizarse las competencias individuales. La gimnasta aún no confirma su participación en las mismas, aunque ya se espera que siga adelante con su decisión.

El tema de la salud mental está tomando cada vez más relevancia en el mundo deportivo. Recientemente Naomi Osaka decidió retirarse del torneo Roland Garros de Francia para evitar hablar con la prensa, ya que según expresó esto la llena de ansiedad.

Con este nuevo caso, que toma mayor relevancia aún por tratarse de los Juegos Olímpicos, la conversación sobre lo que durante mucho tiempo había sido considerado un tema tabú entre las estrellas del deporte, comienza a ser tan o más importante que su condición física o desempeño competitivo.

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