El pasado martes 15 de junio se llevaron a cabo los Premios Soberano, la premiación mas importante de la República Dominicana. En este marco tienda Sirena brindó la oportunidad por medio del ¨Gran Casting Soberano¨ al joven diseñador emergente de Santiago, Cristian Javier, al que se le propuso el reto de vestir a uno de los rostros más importantes de la comunicación de nuestro país, Pamela Sued.

Con la iniciativa  ¨Gran Casting Soberano¨  Sirena recibió más de 3,500 solicitudes, de las cuales se escogieron algunos jóvenes talentosos en áreas como: producción, maquillaje, baile y diseño. En el área de moda resultó elegido Cristian Almonte. El propósito de este año era resaltar los talentos emergentes que aun no son reconocidos por falta de oportunidades como esta, con el lema “Soberano somos todos”.  

 

“Es muy emocionante estar aquí. Agradezco muchísimo la oportunidad, porque no todos los días los premios más grandes de tu país te invitan a ser parte”, fueron las palabras de parte de Almonte, egresado de Chavón, La Escuela de Diseño.

Almonte expresa que esta no es solo una puerta abierta para que el país conozca su trabajo, sino también para que otros jóvenes se sientan inspirados a alcanzar sus sueños y mantengan sus esperanzas. Al igual que le muestra a los consumidores del gremio, que existen otras caras frescas y creativas las cuales están listas para ser aprovechadas.

 

El vestido de gala fue confeccionado en chiffon de seda azul cobalto, drapeado totalmente a mano. Cruzado hacia el costado, formando un delicado escote en V y un abierto en el lado izquierdo de la falda, mostrando la pierna de manera sutil junto a las numerosas capas de chiffon.

Embellecido por completo con miles de cristales, cabuchones y rivolis azul cobalto en el mismo tono del vestido, ubicados en un degradado radial de mayor a menor, partiendo desde la cintura como punto focal, hacia arriba y hacia abajo.

Con mangas en transparencia, cubiertas de cristales degradados igual que en el cuerpo del vestido, terminando con una extensa lluvia de cristales checo en movimiento, ubicados en columna desde en centro al ruedo de la manga.

Por último, vemos un exquisito drapeado en paño en la espalda del vestido, sirviendo como una especie de bolsillo para los cristales azules que caminan hacia el cuello, creando el efecto que están colocados directamente en su piel.

 

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